Todo lo que percibimos nos guía diariamente en cualquier aspecto de nuestra vida y nos muestra constantemente las opciones que en individuales casos o asuntos podemos tomar. Cualquiera de nuestras acciones siempre son afectadas por lo que está a nuestro alrededor, es decir, por nuestra ubicación, debido a esto siempre es importante concientizarnos de cuál es el punto de vista con el que efectuamos nuestra propia opinión antes de ejercer cualquier acción.
Los puntos de vista indican únicamente de lo que se puede percibir en ciertos estados específicos, como por ejemplo, el inicio o el fin de un acontecimiento o un lugar. Desde cada localización existente se pueden percibir ciertos sucesos únicos y particulares, quienes marcan la diferencia entre cada una de las partes o etapas del sistema en el que se esté.
Para definir un punto de vista es necesario atender y memorizar ordenadamente todo lo que se puede percibir solamente desde una ubicación fija. Nunca se debe cambiar de ubicación hasta percibir completamente lo que determinado punto de vista nos permite observar, porque cuando hay un cambio sin confirmación, la definición queda incompleta y distorsionada, haciendo imposible que nuestra visión sea segura.
Cuando se perciben objetivos que se relacionan con nuestros propósitos lo más conveniente es atender las indicaciones de ese punto de vista inmediatamente, con esto alcanzamos a ampliar nuestra percepción sin desperdiciar recursos, dado a que nuestro rango de percepción aumenta sin necesidad de haber estado en todos los lugares.
Es importante que siempre intentemos ampliar nuestro punto de vista, porque entre más grande sea nuestro rango de percepción mayor precisión se obtiene y menor riesgo de equivocación encontramos al momento de actuar.
Los puntos de vista indican únicamente de lo que se puede percibir en ciertos estados específicos, como por ejemplo, el inicio o el fin de un acontecimiento o un lugar. Desde cada localización existente se pueden percibir ciertos sucesos únicos y particulares, quienes marcan la diferencia entre cada una de las partes o etapas del sistema en el que se esté.
Para definir un punto de vista es necesario atender y memorizar ordenadamente todo lo que se puede percibir solamente desde una ubicación fija. Nunca se debe cambiar de ubicación hasta percibir completamente lo que determinado punto de vista nos permite observar, porque cuando hay un cambio sin confirmación, la definición queda incompleta y distorsionada, haciendo imposible que nuestra visión sea segura.
Cuando se perciben objetivos que se relacionan con nuestros propósitos lo más conveniente es atender las indicaciones de ese punto de vista inmediatamente, con esto alcanzamos a ampliar nuestra percepción sin desperdiciar recursos, dado a que nuestro rango de percepción aumenta sin necesidad de haber estado en todos los lugares.
Es importante que siempre intentemos ampliar nuestro punto de vista, porque entre más grande sea nuestro rango de percepción mayor precisión se obtiene y menor riesgo de equivocación encontramos al momento de actuar.
Cuando somos responsables de nuestros propios actos, es de gran importancia definir en donde estamos y desde cual opinión ejercemos todas nuestras acciones, pero para lograr esa definición no es conveniente afanarse, siempre
hay que percibir con alta precaución, actuando según lo que percibimos y hemos memorizado, únicamente así se puede lograr
alcanzar los objetivos que están bajo nuestra responsabilidad. Entre más nos afanamos
menos vemos y más riesgos corremos, por eso debemos ajustar lo que se denomina
velocidad de recepción, según sea el tamaño de nuestro asunto, dado a que este puede variar.
Todo punto de vista es importante, principalmente al momento
de estudiar, por eso siempre es necesario guardar idea de todas las experiencias a lo
largo de la vida.
Nunca hay que conformarse en explorar más, excepto si el objetivo es dañino e innecesario.
Nunca hay que conformarse en explorar más, excepto si el objetivo es dañino e innecesario.
